En 1896, John Brooks inventó la “camisa con botones” original inspirada en los jugadores de polo ingleses.
La camisa con botones se convirtió en un elemento básico de la moda estadounidense en el siglo XX y en el antepasado del polo moderno.
El primer polo fue diseñado para tenis y tenía un caimán verde como logo.
En el campeonato del US Open de 1926, un tenista trae el primer polo a la cancha; Blanco, de manga corta, confeccionado en piqué de algodón con cuello plano saliente, tapeta con botones y espalda más larga que la delantera

El polo de cashmere ligero puede sustituir a la camisa por elegancia. Los de algodón experimentan con diferentes finuras y pesos. Malo lleva 50 años estudiando siluetas, proporciones y detalles para convertirlo en una pequeña obra maestra de la artesanía. Son los telares históricos los que hacen la magia.
Detrás de cada polo hay un mundo: puntadas, modelos, cuellos, mangas, costillas, costuras… Un estudio constante.
Los cuellos de nuestros polos son caídos y moldeados, se necesita dedicación y cuidado para hacerlos. Este método es refinado y nos permite evitar cualquier desperdicio de embalaje que se pueda tener con las overlockers clásicas.
A John Brooks le debemos la invención del polo deportivo, a Malo su sublimación en una prenda atemporal